ANTE EL FRÍO
¿Tienes que cambiar de estufa? Qué es mejor leña o pellets
Las estufas de pellets cada vez se están extendiendo más como sistema de calefacción, si te estás preguntando qué es mejor a la hora de calentar una vivienda te contamos algunas de las ventajas e inconvenientes de cada una.
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Con la llegada del frío muchas estufas y calefacciones vuelven a ponerse en marcha. En las ciudades es más común que para caldear la casa se use un sistema de calefacción central, eléctrica y cada vez más también nuevos sistemas como la aerotermia o el suelo radiante. Sin olvidarnos obviamente de las clásicas estufas de gas o de resistencia o los calefactores de aire.
Sin embargo, en muchas zonas rurales o más alejadas de la ciudad, el método de calefacción por excelencia ha sido siempre la chimenea o estufa de leña, aunque como todos los nuevos sistemas de calefacción también se imponen en estas zonas. El gran inconveniente de las estufas de leña a pesar del posible mal olor que pueda dejar en la casa al quemar la madera es el lugar donde almacenar el combustible, es decir, la leña cortada. Aunque normalmente las casas que usan este sistema de calefacción ya suelen tener un hueco pensado para este propósito.
No obstante, cada vez más se está extendiendo un nuevo sistema de calefacción eléctrica con un nuevo combustible, los pellets. Este tipo de estufas tienen que estar conectadas a la luz, pero no suelen tener un gran consumo de electricidad. Al igual que las de leña deben tener una salida de humos ya que funcionan quemando pellets que son residuos de madera y otros materiales naturales que recogen de limpiezas forestales y de industrias madereras. Estos residuos tras ser recolectados son prensados y transformados en pequeños palitos, similar en la forma a algunos piensos de animales. A diferencia de la leña, estos ocupan poco espacio y causan menos olor al ser quemados.
Por otro lado, este tipo de estufas de pellets se puede seleccionar una temperatura determinada, encender y apagar con facilidad. Las de leña en cambio no se puede controlar la temperatura y su encendido y apagado es más costoso.
Si te estás planteando cuál de los dos sistemas puede ser mejor, en realidad los dos sistemas están bastante igualados, por lo que dependerá de la preferencia del usuario.
Según la OCU, comprar una estufa de pellets puede costar actualmente el doble que una de leña habitual, al igual que el combustible, es decir, la leña actualmente está más barata que el pellet aunque esto puede ir cambiando dependiendo del mercado.
Sin embargo, en lo que a eficiencia se refiere, las de pellets son mejores ya que gastan menos por el mismo tiempo que están en funcionamiento. Según la Organización de Consumidores y Usuarios, para calentar una vivienda de 90 metros cuadrados apenas habría una diferencia de 33 euros entre una estufa de leña y otra de pellets.
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