SEGÚN UN ESTUDIO

Las quejas de los mayores por discriminación están vinculadas a brecha digital y cuidados

Los tres principales motivos de consulta al Servicio Estatal de Atención a Personas Mayores son prestaciones y servicios (36,1 %), brecha digital (26,1 %) y cuidados (10,6).

Una persona mayor usando el teléfono móvil

Una persona mayor usando el teléfono móviliStock

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Los principales obstáculos que encuentran los mayores en su día a día están vinculados al acceso a información sobre prestaciones y servicios, la brecha digital y los cuidados, y son las mujeres las más activas a la hora de pedir ayuda o de denunciar discriminaciones.

Son datos del informe del Servicio Estatal de Atención a Personas Mayores (SEAM) en su primer año de funcionamiento, un servicio estatal y gratuito que busca mejorar la información y acompañar a los mayores ante situaciones de discriminación por razón de edad y que ha recogido más de medio millar de consultas y quejas.

Seis de cada diez personas que acuden a este servicio de orientación son mujeres y realizan consultas tanto sobre sí mismas, como sobre personas a las que cuidan (madres, abuelas, tías) o de su entorno (como vecinos).

Los tres principales motivos: prestaciones y servicios (36,1 %), brecha digital (26,1 %) y cuidados (10,6).

Los mayores eligen el teléfono (900 22 22 22) de manera prioritaria para plantear estas cuestiones -el 94 %- y muy pocos el correo electrónico (www.servicioseam.es) o el chat.

Respecto a las edades, son las personas entre 75 y 79 años las que acuden más a la línea de atención; por comunidades, más de la mitad de las consultas proceden de la Comunidad de Madrid (25 %), Andalucía (21 %) y Castilla-La Mancha (11 %).

"Las administraciones no son amables en su lenguaje ni accesibles con los mayores; hay mucho edadismo también en servicios de consumo, como denegar una tarjeta de compra porque se tiene más de 70 años o limitar algunos bienes por la edad", ha explicado Isabel Martínez, presidenta de HelpAge Internacional España que gestiona este servicio.

Muchos mayores no son conscientes y pocos denuncian

"El problema del edadismo es que las personas no son conscientes de esa discriminación; se identifica el machismo, la xenofobia o el racismo pero los mayores no se sienten que ellos sean objeto de discriminación", añade Martínez.

Para la presidenta de esta entidad de lucha contra el edadismo y la discriminación de los mayores existe un sesgo de género: "A las mujeres les resulta más fácil reconocer la discriminación y no tienen ningún pudor en contar el problema y denunciarlo, frente a los hombres".

"Urge hacer algo sobre la brecha digital, no solo por los problemas de accesibilidad que puedan tener en los bancos que es lo más conocido, sino por la vulneración grave de acceso a servicios públicos esenciales, como a sanidad o a citas para gestiones administrativas", ha lamentado.

El estudio también muestra que las personas mayores no suelen denunciar y que acuden a este servicio "a plantear sus problemas, a que les escuchen", pero sin la intención de ir más allá en la mayoría de los casos, ha explicado la coordinadora del SEAM, María Gangutia.

Una de cada dos personas ha tenido comportamientos edadistas

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada dos personas en el mundo ha tenido comportamientos edadistas en la vida cotidiana, de manera consciente o inconsciente.

"Hace falta mucha pedagogía", ha planteado la responsable de la entidad de defensa de los mayores.

En la presentación del informe, la directora del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), Mayte Sancho, ha apostado por el reto de llegar al grupo de población de mujeres y hombres muy mayores y "con grandes dificultades de acceso a la información, por cuestiones generacionales principalmente".

También, ha destacado la importancia de sensibilizar más a los hombres "que no acaban de acceder a los servicios de ayudas" que se plantean para las personas mayores.

Entre las múltiples formas para combatir el edadismo, la responsable del Imserso ha explicado que trabaja con la DGT para modificar algunas señales de tráfico que puedan resultar ofensivas y ha abogado por eliminar carteles que señalizan servicios para mayores, como centros. "Tu casa no está señalizada, pues el centro tampoco".

Para la presidenta de HelpAge Internacional España es necesaria una ley integral para las personas mayores "que revise todas las políticas públicas y remueva esas cuestiones de edadismo que impregnan las políticas, como la limitación de edad en las mesas electorales".

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