DISCRIMINACIÓN POR EL LENGUAJE

Eres edadista y no lo sabes: las expresiones que usas a diario que discriminan a los mayores por su edad

Al igual que ocurre con los micromachismos al hablar, en nuestro lenguaje usamos sin ser conscientes palabras edadistas, es decir, palabras que discriminan a las personas mayores, aunque en muchas o la mayoría de las ocasiones lo hacemos realmente sin ser conscientes de que al usarlas estamos discriminando.

Abuso de personas mayoresiStock

Aunque la palabra 'Edadismo' fue aprobada para entrar este año comotérmino en el diccionario por la RAE, en realidad es algo que ha existido desde hace mucho tiempo, hablamos de la discriminación que pueden sufrir algunas personas por razón de su edad. Normalmente esta discriminación la suelen sufrir las personas mayores.

Curiosamente este edadismo está más presente en nuestras vidas de lo que puedas pensar, ya que aunque inconscientemente no se tenga voluntad de discriminar a ninguna persona mayor, muchas veces lo hacemos a través del lenguaje con expresiones por ejemplo: "Déjame a mi que ya estás mayor para hacer estas cosas", que igual con esta frase quieres ayudar a un ser querido con alguna tarea, pero al final no dejas de excluirlo por su edad.

Por este motivo y quizá para que seamos un poco más conscientes del uso del lenguaje, El Programa de Personas Mayores de la FundaciónLa Caixa, en su objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas de este colectivo ha lanzado el 'Glosario sobre edadismo' donde se han recopilado palabras y expresiones edadistas proporcionadas por los participantes de diferentes dinámicas que la fundación ha llevado a cabo.

La fundación asegura que de entre las más de 300 palabras y expresiones recogidas a lo largo de las dinámicas, ha seleccionado las 45 más representativas para crear este glosario.

Es importante atajar el edadismo ya que con él se invisibiliza y se excluye a las personas mayores de la sociedad en general con respecto al lenguaje esto afecta en las palabras que decimos, el tono en el que lo decimos, el poder que les otorgamos a los mayores en las tomas de decisiones, el respeto a sus preferencias o la empatía.

La fundación señala, que en este glosario se han agrupado las expresiones en las tres formas más habituales de edadismo: Infantilización, despersonalización y deshumanización.

Cuando hablamos de infantilización, son expresiones en las que se le habla a otra persona como si fuera un niño pequeño, esto hace que, aunque estemos hablando con una persona adulta se le sitúe en una posición de inferioridad a la hora de hablar, interactuar o decidir. En este aspecto podemos encontrar las frases "son como niños" o palabras "cariño, bonita o cielo". En estos contextos también se suele pluralizar para reforzar esa inferioridad "vamos a ducharnos", "Vamos a tomar la medicación", aunque este tipo de situaciones suelen darse más cuando la persona mayor es más dependiente.

En cuanto a la despersonalización son palabras que hacen referencia a las personas mayores como un grupo homogéneo, como podrían ser palabras como viejo, jubilado o abuelo. En el caso de jubilado “homogeneizan a la población de esta edad por su vinculación con el trabajo o la palabra "abuelo" para referirse a personas mayores (tengan o tengan nietos). En el caso de la palabra viejo y muchas de las expresiones en las que se usa este adjetivo, utilizado también como sustantivo, reflejan negatividad hacia una persona de edad avanzada por las implicaciones negativas que tiene ser mayor.

En esta despersonalización también podemos encontrar expresiones como "Estar senil", "Estar gagá" o "Son achaques de la edad".

Finalmente hablamos de 'Deshumanizar' cuando se pierde la empatía en el trato con las personas mayores. Aquí podrían entrar expresiones como "momia", "dinosaurio", "cascajo" entre muchas otras.

Tampoco hay que olvidar el 'autoedadismo' que muchas personas interiorizan sin saberlo con frases como "ya estoy mayor para esto".