DE TODA LA VIDA

Tres trucos de belleza de las abuelas que no deberías dejar de utilizar por su eficacia

Han pasado de generación en generación, pero estos trucos que usaban nuestras abuelas son de lo más efectivos para mantener la belleza natural.

Señora mayor cuidándose la piel

Señora mayor cuidándose la pieliStock

Publicidad

Aunque el mundo de la cosmética y la belleza está cada vez más estudiado y medido al milímetro con una industria de productos gigantesca detrás especializada en este tipo de tratamientos estéticos hay veces que los trucos más sencillos que ya usaban nuestras abuelas acaban siendo los más infalibles y eficaces.

La experiencia siempre es un grado y de generación en generación se ha ido transmitiendo algunos trucos o "remedios de la abuela" para muchas cosas, tareas del hogar, recetas de cocina y también tratamientos de belleza. Aquí recopilamos tres tratamientos para mantener una belleza natural.

Lavarse la cara con agua fría

Aunque esto pueda ser un básico de la mayoría de la gente cada mañana, quizá la clave sea la temperatura del agua, ya que en la actualidad la mayoría usará el agua templada para lavarse. Sin embargo, antaño no era tan fácil lavarse con agua caliente por lo que la rutina diaria para empezar bien el día comienza con un buen lavado de cara con agua fría para despejarse y reactivar la circulación de la piel.

Usa el pintalabios como colorete

Antes de que se especializara el maquillaje con las diferentes bases, iluminadores y coloretes, una de las formas más básicas de darle a nuestro rostro un tono más saludable era utilizando un poco del color del carmín y aplicarlo en las mejillas y difuminarlo. Estas quedaban algo más sonrosada y daban al rostro algo más de color.

Cepillarse el pelo a diario

Un truco que quizá esté en desuso por el ritmo de vida actual pero que sin embargo podemos contemplar en numerosas películas era cepillarse el pelo antes de ir a la cama. Antiguamente era habitual que las mujeres llevaran el pelo largo y recogido durante el día. Por la noche lo soltaban y cepillaban para desenredar, evitar que se rompiera tras sufrir durante horas los peinados recogidos y mantener el pelo sano. Ya que este paso, cepillar el pelo, es fundamental para mantener una buena melena saludable.

También era un paso muy necesario para mantenerlo "limpio" ya que antiguamente las personas no se podían bañar o lavar tanto como ahora.

Hablando en Plata» Estilo de vida

Publicidad