SEGÚN UN ESTUDIO
La salud dental puede afectar al estado anímico de las personas mayores
De acuerdo con una investigación del Hospital Universitario de Okayama, Japón, la salud bucodental influye en el bienestar psicológico mediante efectos relacionados con la nutrición y el entorno.
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Como dice el refrán “tripa vacía, corazón sin alegría”. No obstante, se debe tener cuidado con lo que se come, sobre todo a medida que se van cumpliendo años, ya que puede afectar directamente a nuestra salud bucodental, y, por consiguiente, a nuestro estado anímico.Esta posee una naturaleza multidimensional e incluye dominios físicos, psicológicos, emocionales y sociales que soncruciales para la salud y el bienestar general. O, al menos, así lo ha demostrado Investigadores del Hospital Universitario de Okayama , en Japón.
Plubicado enPLOS-ONE, este estudio tiene como objetivo “identificar las asociaciones entre las características individuales y ambientales, la condición bucal y el estado nutricional en relación con el bienestar subjetivo entre adultos mayores utilizando el modelo conceptual de Wilson y Cleary”. Para ello, tomó como participantes a adultos mayores de 60 años que acudían al Hospital Universitario. En ellos, se examinaron las condiciones orales, como la carga bacteriana en el revestimiento de la lengua, la habilidad de masticar, así como la capacidad de deglución, entre otras.
Los resultados evidenciaron cómo estas mediciones se encontraban estrechamente relacionadas con el bienestar psicológico de sus participantes. De la misma forma, hicieron un análisis del estado nutricional de los mismos y descubrieron que el estado bucodental desempeña un papel esencial a la hora de determinar los tipos de alimentos que una persona puede llegar a consumir. Por tanto, dicho estado puede influir en la ingesta nutricionaly, por consiguiente, en su salud.
Por otro lado, este estudio también aporta pruebas de una estrecha conexión entre la salud bucodental y el entorno personal y socialdel individuo. De manera que una mala relación puede provocar un estrés psicológico que, en ciertas personas, puede conllevar a malos hábitos como el tabaquismoo consumo de dulces. Esto supondrá un aumento de las enfermedades de las encías, caries, o en el peor de los casos, la pérdida del diente.
Por lo tanto, es evidente que, con el paso del tiempo, la mejora en la esperanza de vida no sólo ha supuesto un cambio en la población, sino también en la atención sanitaria. Una población que cada vez exige una mayor atención por parte de los profesionales. De ahí que este estudio también sugiera unainversión sanitaria en la salud bucodental, ya que puede aportar crecientes beneficios para la salud, especialmente para la tercera edad.
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