ATENTO A LOS RESULTADOS
Qué niveles de glucosa son óptimos a partir de los 50
Los niveles de glucosa en sangre varían según va avanzando la edad y hay que extremar la precaución, por ello es de vital importancia saber cuáles son unos niveles óptimos.
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Según va avanzando la edad, la forma en la que el cuerpo reacciona a la glucosa y a la insulina hace que los niveles varíen, volviéndose algo esencial que controlar para mantener una buena salud.
Para medir los niveles de glucosa hay que tener en cuenta dos cosas, por un lado, los niveles varían en función de la edad, de la misma forma que los óptimos variarán en función del momento en el que lo midas. Ya que no es lo mimo medirla en ayunas que después de comer. Desde el Hospital Universitario Virgen del Mar nos explican que niveles son buenos en cada edad.
Valores normales a partir de los 50 en ayunas:
- Entre 50 y 60 años: Los valores óptimos de glucosa en sangre en ayunas serán entre 90 y 100 mg/dL.
- A partir de los 60: Los valores deberán estar entre 80 mg/dL y 110 mg/dL.
Si te encuentras justo en el límite de los valores significará que estas en unos niveles saludables de glucosa y no debería haber problemas.
Si tus valores se encuentran entre 100 mg/dL y 125 mg/dL nos indicaría que podríamos padecer de prediabetes.
Si tus niveles duplican o triplican el límite deberás acudir inmediatamente al médico.
Valores óptimos después de comer:
Después de comer es normal que los valores de glucosa aumenten.
- Un valor normal 2h después de haber ingerido algo, debería ser menos de 140mg/dL.
Si tus valores se encuentran entre 140 mg/dL y 199 mg/dL podrías estar en una situación de prediabetes (intolerancia a la glucosa), la cual se debería confirmar con una prueba médica.
Si tus valores superan los 200 mg/dL podrías padecer diabetes de tipo 1 o de tipo 2, pero ante este tipo de lecturas será vital consultar con un profesional para que te haga un buen diagnóstico.
Un nivel elevado de glucosa se puede deber a factores como una falta de tratamiento médico en personas con diabetes, enfermedades subyacentes, estrés, consumo excesivo de carbohidratos...
La monitorización de los niveles de glucosa es esencial según va avanzando la edad, y la forma más común de hacerlo en el día a día es a través de un glucómetro, pero para diagnosticar la diabetes no se podrá hacer de esta manera, sino que será a través de una glucemia venosa. Ante cualquier duda lo más recomendable será consultar con un profesional.
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