La atención telefónica disminuye los niveles de depresión y soledad

Decía Gustavo Adolfo Bécquer que "la soledad es el imperio de la conciencia". Sin embargo, es en esa consciencia cuando puede entrar en juego la salud mental. Desde la pandemia de la COVID, el número de personas aisladas, sobre todo las mayores, han crecido considerablemente, provocando que el riesgo de padecer síntomas depresivos sea mayor.Unos síntomas que han querido prevenir desde el ensayo de Activación Conductual en el Aislamiento Social (ensayo BASIL+).

Publicado en la revista The Lancy (Healthy Longevity) , este estudio comenzó en 2020con el objetivo de encontrar evidenciasa la hora de prevenir la soledad. Para ello, contaron con la participación de personas mayores de 65 años con múltiples enfermedades degenerativas y procedentes de 25 ciudades del Reino Unido. Se les pidió que se protegieran de la COVID, suponiendo un alto riesgo de aislamiento y, por consiguiente, de depresión.

Para poder paliar esto, investigadores de la Universidad de York y la Facultad de Medicina de Hull York y del Tees, Esk, en conjunto con la WearValleys NHS Foundation Trust, en Reino Unido, determinaron en dicho estudio que laatención telefónicaposee un mayor beneficio para la enfermedad que los pacientes que toman antidepresivos.

En el estudio, se confirmaron que los niveles de soledad emocional disminuyeron un 21% durante el período de tres meses. Asimismo, también confirmaron que esos niveles beneficiosos se mantenían conforme pasaba el tiempo y las llamadas telefónicas cesaban, lo que supone un impacto positivo a largo plazo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denominado la soledad como una “preocupación de salud global”. Una preocupación donde se pone especial atención en las personas mayores, un sector en peligro y con una alta probabilidad de padecerlos. No obstante, gracias al estudio, se demuestra que una simple llamada sí que puede salvar vidas.