Así funcionan las cucharas estabilizadoras que ayudan a comer a personas con temblores

El Parkinson es una de las enfermedades neurodegenerativas más graves y que afecta a un mayor número de personas. Se estima que en España se registraron en 2020 algo más de 39.000 altas, según datos del Ministerio de Sanidad. A nivel mundial, afecta entre el 1 y 2% de los mayores de 65 años.

Su síntoma más famoso son los temblores, lo que deriva en rigidez muscular, dificultad en el habla o la pérdida de movimientos automáticos que hacen que el día a día de la persona afectada sea muy complicada de sobrellevar. Pero no solo lo produce el Parkinson, pues el temblor esencial se reconoce como el temblor patológico más prevalente entre la población adulta, afectando aproximadamente al 0,9% de la población mundial.

Para reducir estas dificultades han surgido aplicaciones o mecanismos que ayudan al paciente a reducir estos síntomas, como una IA que imita la escritura manual.

También para otras tareas básicas como es alimentarse. Así, han surgido herramientas como cucharas estabilizadores que reducen el temblor del brazo y permiten llevarse el alimento a la boca con más facilidad sin que se derrame su contenido por el camino.

Tal y como ha recogido el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, el temblor se registra en este dispositivo y se ajusta la posición de su cabezal en función del movimiento que detecta: "En primer lugar, se calibra obteniendo la posición del ángulo en que se encuentra y a partir de ahí envía una señal a los motores, que se incorporan en el mango de la cuchara, para ajustar su posición".

Esta cuchara funciona a partir de dos motores, uno longitudinal y otro transversal, que generan un movimiento giroscópico en dirección opuesta al temblor. Ambos motores se conectan a un módulo de control, que recibe información de la vibración a través de diferentes sensores de movimiento ubicados en el interior del dispositivo.

Tal y como afirman, esta cuchara, desarrollada por el Centro de Referencia Estatal de atención a personas con enfermedad de Alzheimer y otras demencias, puede reducir los efectos del temblor hasta en un 85%, además de permitir ver los seguir los resultados a través de una app durante su uso.

Lo que sin duda mejora su independencia y bienestar físico y emocional, así como de sus cuidadores.

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