"Su actitud de vida es otra cosa": un joven relata la conversación de él y una mujer de 85 años, compañeros de asiento durante un viaje

A veces, los viajes en transporte público pueden resultar algo tediosos y molestos si nos toca un compañero desagradable. En cambio, si tenemos la suerte de conectar con el desconocido que sienta al lado, puede convertirse en una experiencia inolvidable. Y esto es más o menos lo que les pasó a los protagonistas de esta historia. Se llevaban una gran diferencia de edad, pero no impidió que ambos no pararan de hablar en las tres horas de trayecto que compartieron.

El joven ha compartido su historia a través de su página de Facebook, junto a la foto de la protagonista que se llama Nereida Alfonso y él en el propio avión. El hombre cuenta que la señora sabe disfrutar de la vida, que ha viajado mucho y lo sigue haciendo.

Asegura que Nereida de viernes a domingo se bebe sus 5 o 6 cervecitas en su casa tranquila y que se monta en el autobús para pasear e irse a bailar. También le llegó a comentar que cuando muera quiere que esparzan sus cenizas en el mar.

Según el joven por suerte Nereida tiene una familia muy unida, con hijos, nietos y hasta bisnietos, con los que se va de viaje a todos lados. "Creo que esta es la parte más bonita, además de su felicidad" señalaba el chico, "el cómo su familia la cuida y lo unida que es".

A sus 85 años Nereida todavía conduce y le gusta ir comparando los precios de los supermercados. "Su actitud de vida es otra cosa" Finalizaba

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