Qué ocurre si no dejas testamento: ¿Cómo se reparte la herencia?

Ya hemos hablado en otra ocasión de lo útil que puede ser para los familiares del fallecido el haber dejado hecho un testamento, sin embargo, no es algo obligatorio que se haya que hacer ya que la ley tiene establecidas una serie de pautas para repartir los bienes entre los herederos de un fallecido.

En primer lugar, si el fallecido estaba casado y con hijos dependerá principalmente del régimen en el que se firmó ese matrimonio para repartir la herencia, es decir, si el matrimonio es en gananciales automáticamente el 50% de la herencia va a parar al viudo del fallecido y el otro 50% a los hijos del matrimonio.

En cambio, si el matrimonio está en régimen de separación de bienes, la viuda o viudo y el hijo se repartirán la herencia a partes iguales, sin embargo, si en el matrimonio hay más hijos (entre 2 y 6) el viudo se quedará con el doble de la herencia que le corresponda a cada hijo. Si se tuvieran más de 7 hijos el viudo o viuda solo optaría al 25% de la herencia.

Entre los hermanos cuyos padres han fallecido, se repartirá la herencia a partes iguales.

Al igual que ocurre si el que fallece es uno de los hermanos y este no está casado ni tiene ascendentes o descendientes, sus posesiones y deudas las heredarán a partes iguales el resto de los hermanos. Si uno de estos hermanos también hubiera fallecido y tuviera hijos, serían el sobrino o los sobrinos de este quién heredarían la parte proporcional que le correspondería por parte del hermano de su padre o madre que acaba de fallecer.

En el caso en el que los herederos fueran de rango ascendente, estos irían en grado de cercanía, primero los padres y luego los abuelos

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