La brecha de género en las pensiones: Un problema que persiste

En febrero de 2021 se aprobó un complemento para reducir la brecha de género en las pensiones, partía de la necesidad de establecer una herramienta eficiente para reducir las diferencias entre las pensiones de hombres y mujeres. Este complemento se concede al progenitor ya sea hombre o mujer que pueda acreditar un perjuicio a su carrera profesional tras el nacimiento de un hijo o hija, algo que habitualmente han sufrido de forma abrumadora las mujeres, y es una de las principales causas de la existencia de la brecha de género en la cuantía de la pensión en la actualidad.

Aunque inicialmente se pensó sobre todo para las mujeres, pueden solicitarlo ambos progenitores, no obstante, por defecto si ningún progenitor lo solicita este complemento se le reconocerá a la madre. El importe de este complemento actualmente es de unos 33,20 euros al mes por cada hijo (hasta un máximo de 4) que se le suma a la pensión. Sin embargo, parece que este complemento no es suficiente para paliar la gran brecha entre las pensiones de hombres y mujeres.

Actualmente hay una diferencia general del 32,27% entre las pensiones de hombres y mujeres según contaba Paqui Díaz representante de la Comisión de la Mujer de Coespe (Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones) a Ondacero Madrid. De hecho, Paqui comentaba que la pensión media más o menos de un hombre suele rondar los 1500 euros y las de las mujeres suelen rondar los 1000, una diferencia de unos 480 euros aproximadamente.

Esta diferencia entre la pensión habitual de un hombre y una mujer viene dada sobre todo por la diferencia de años cotizados, mientras que habitualmente el hombre ha podido seguir con su carrera laboral, las mujeres en muchos casos tenían que abandonar sus profesiones, para dedicarse al cuidado de los hijos, la casa u otros familiares, o en el caso de poder seguir trabajando, haciéndolo a través de contratos a tiempo parcial o reduciendo la jornada laboral. Esta situación, al final de su vida laboral, les ha perjudicado teniendo pensiones considerablemente más bajas que las de los hombres.

Por este motivo COESPE propone una serie de medidas para reducir la brecha de género de forma definitiva de las pensiones ya que según Díaz "faltan medidas estructurales en el terreno laboral, económico, social y cultural".

En primer lugar, una de las medidas que proponen es que la pensión mínima debería ser igual al salario mínimo interprofesional, y que este salario mínimo llegue al menos al 60% del salario medio del país. Actualmente hay pensionistas con pensiones muy bajas como única fuente de ingresos que apenas les permite subsistir.

También señalan la necesidad de que el complemento de la brecha de género se extienda a todas las mujeres pensionistas, con carácter retroactivo anterior de febrero de 2021 cuando se aprobó este complemento, para poder llegar a más mujeres pensionistas y que este también se aplique a las pensiones de jubilación anticipada y las pensiones no contributivas.

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